El temor de ser objetivo militar de los grupos armados ilegales presentes en la zona de Palestina y el Coco, dos veredas de este municipio chocoano limítrofe con Buenaventura, sobre el río San Juan, los ha obligado a tomar esa decisión.
A pesar de que Acción Social, la Personería Municipal y las autoridades locales, han manejado la situación con mucho hermetismo aduciendo razones de protección a estas familias se ha podido precisar que las 38 familias de comunidades negras se han asentado donde familiares y amigos en barrios de la zona continental, como el R9 y Seis de Enero.
Entre tanto, los indígenas pertenecientes a la comunidad de Santa Rosa de Guayacán, en la zona del Bajo Calima, se han ubicado en el barrio Cabal Pombo a la espera de recibir las ayudas humanitarias.
Fuentes militares consultadas señalaron que en la zona de Palestina se teme por un enfrentamiento armado entre guerrilleros de las Farc y ELN que operan en la zona con bandas criminales al servicio del narcotráfico como las Aguilas Negras y Los Rastrojos.
De hecho según denuncias de las autoridades del Litoral del San Juan, dos nativos de comunidades negras fueron asesinados en Palestina por estos actores armados el pasado mes de julio.
El desplazamiento se ha venido dando de forma graneada desde el pasado 28 de julio.
La Armada Nacional ha señalado que mantiene control de la zona, especialmente de Palestina, donde hay un puesto pero requirieron de la comunidad mayor colaboración para denunciar a los responsables de estas situaciones.
El alcalde de Docordó, la cabecera municipal del Litoral del San Juan, Dagoberto Moreno, pidió de las autoridades mayor presencia en la zona y ayuda humanitaria pues tanto él como su personero municipal han sido objeto de amenazas de muerte de esos actores armados.
Funcionarios de la alcaldía de Buenaventura indicó que ya se han dado las primeras ayudas a estos desplazados.
La vereda Palestina está ubicada a una hora con 45 minutos de la base naval de Bahía Málaga, en lancha.
