El pueblo de Israel, en sus momentos más difíciles, hacía memoria del camino recorrido y lograba descubrir ahí la presencia de Dios – y que su historia, a pesar de todo, era Historia de Salvación.
Por lo tanto, para este año se ha escogido el siguiente lema y párrafo bíblico:
“PA’ TEJER OTRA HISTORIA – ¡HAGAMOS MEMORIA!”
“Acuérdate del camino que Yahvé, Tu Dios, te hizo recorrer… a la tierra prometida” (Dt 8,12)
Proponemos aprovechar la Semana por la Paz para iniciar y/o fortalecer un proceso de recuperación colectiva de la memoria histórica del camino recorrido de nuestras comunidades
Trabajaremos una propuesta metodológica para realizar esta reflexión colectiva de la memoria durante la Semana por la Paz y a lo largo de los siguiente meses en los diferentes grupos parroquiales e instituciones educativas con la esperanza de encontrar mediante esta reflexión respuestas para el presente y futuro de nuestra Costa Pacífica Nariñense
Explicación del logo y tema de la Semana por la Paz
Las dos caras del hombre y de la mujer, mirando hacia atrás y mirando hacia adelante, están representando la memoria que se quiere reconstruir de manera colectiva, entre todas las generaciones.
En el centro está un árbol con sus raíces y con ramas que a la vez recuerdan los dedos de una mano.
En la palma de esta mano está el mapa de los municipios de la Costa Pacífica Nariñense, la cual está “despedazada” y que la mano trata de nuevo unificar. El árbol tiene sus raíces en una franja de color amarillo, que significa la luz de la fe en el Dios de la Vida que acompaña a su pueblo en su Historia de Salvación y quien resucitó a Cristo, vencedor de la muerte.
Reconstruir la memoria colectiva debe ayudarnos a fortalecer las raíces de este árbol: nuestros valores, nuestra identidad y sentido de pertenencia como pueblo de Dios, afro, indígena y mestizo, para resistir mejor las tormentas
del conflicto social y armado que nos toca vivir. El recordar de manera comunitaria también nos puede
dar luces para revisar el camino recorrido, corregir errores cometidos, recuperar la esperanza en un futuro de paz y prestar nuestras manos para unir los “pedazos” de nuestra comunidad y región; es decir: PA’ TEJER OTRA HISTORIA.
