Pacífico, 8 de marzo de 2022
En el marco del día Internacional de la mujer trabajadora, desde la Comisión Interétnica de la Verdad de la Región Pacífico nos permitimos nuevamente evidenciar todas las formas de violación de los derechos humanos y colectivos que aún padecemos las mujeres en el territorio región. Un territorio en donde aún se impone el patriarcado como una de las principales causas de sumisión, desigualdad, discriminación y dominación hacia las mujeres.
Esta situación ha sido constante y sistemática, y afecta profundamente la vida de las mujeres y de sus comunidades debido a la importancia significativa que tienen sus aportes sociales, culturales, políticos, ambientales y económicos en la construcción de nuestro país y de los pueblos étnicos. Este escenario de riesgo permanente del cual son objeto las mujeres supera los esfuerzos adelantados por ellas, desde sus organizaciones de base, para defender y proteger nuestros derechos.
Así mismo, reconocemos, valoramos y exaltamos las distintas contribuciones que las mujeres brindan en la defensa de la vida y el territorio, como un mecanismo para construir estructuralmente todo aquello que nos daña y minimiza la capacidad propia; allanando espacios de participación política y de toma de decisiones, posicionando una participación desde las particularidades de lo que es ser mujer; movilizándose permanente frente a la violación sistemática y planificada de los derechos étnicos territoriales y frente a la doble discriminación exacerbada a la que se enfrentan las mujeres pertenecientes a pueblos étnicos. Todo lo anteriormente mencionado se cruza con la incapacidad del Estado colombiano para protegerlas.
Las mujeres en el Pacífico nos reafirmamos en continuar con nuestras narrativas frente a la construcción de la verdad como aporte al esclarecimiento, en lograr contar con las garantías de no repetición para avanzar en juntanza en la construcción de territorios libres de violencias, y transformar y deconstruir nuestras realidades para avanzar hacia un Pacífico en donde no nos falte ninguna y en el que todas podamos vivir sabroso.
¡Gracias a la mujer del Pacífico ¡
¡Nada que celebrar, todo por conmemorar!
¡Si tocan a una, nos tocan a todas ¡
