“El domingo 02 de Mayo de 2010 se llevó a cabo un atentado terrorista en la población de Guapi-Cauca que consistió en la explosión de una bomba que le había sido entregada a un habitante de la zona urbana y que seguramente fue activada por los actores intelectuales de ésta acción violenta cuando el portador se aproximaba a la estación de la Policía Nacional. El resultado: el cuerpo totalmente destrozado de quien llevaba la bomba, 12 personas heridas y grandes destrozos en la Curia Episcopal, en la Estación de Policía y en las casas vecinas.
Este hecho se suma a otros similares ocurridos en las siguientes fechas:
- 9 mayo de 2009. Petardo en zona rural cerca a las instalaciones del parque generador de energía.
- 20 de mayo de 2009. Explosión de una bomba cerca de la Estación de Policía y de la Curia Episcopal.
- 21 de julio de 2009. Hallazgo de un artefacto explosivo debajo del puente entre los barrios las Flores y Santa Mónica. No detonado.
- 19 de agosto de 2009. Explosión de bomba en el muelle turístico. Deja una persona muerta, al parecer era la portadora del artefacto.
- 7 de diciembre de 2009. Explosión de una granada frente al hotel Rio Guapi. Deja dos personas muertas, una madre de familia y su hija y 10 personas heridas”.
La Pastoral Social también hace un llamado a los distintos sectores de la sociedad, caracterizando el tipo de acción como un “atentado muy grave contra el principal de los derechos humanos que es el derecho a la vida; igualmente son una violación del derecho a la paz y a vivir en libertad porque siembran el miedo y el terror en las comunidades”. Razones suficientes para expresar el total rechazo.
Por último, invitan a las “Instituciones, a los grupos y a las organizaciones comunitarias a poner todos sus esfuerzos al servicio del trabajo por la paz y del respeto por el derecho a la vida”.
