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Actualidad

En veremos, proyecto eléctrico en el Puerto de Buenaventura

By noviembre 5, 2014noviembre 9th, 2024No Comments

La advertencia la hizo el gerente de la Empresa de Energía del Pacífico, Epsa, Óscar Iván Zuluaga, quien rechazó versiones de algunos sectores que insinúan que la segunda línea no se ha construido porque no sería rentable para la Epsa.

“Independientemente de que en este momento sea rentable o no, esta línea de transmisión de 48 kilómetros es muy importante para el desarrollo industrial futuro de Buenaventura”, aseveró Zuluaga, quien anotó que lo grave de no iniciarse su construcción a tiempo es que los costos se están incrementando mucho.

El proyecto originalmente, hace cuatro años, tenía un costo de $45.000 millones cuando se aprobó por parte del Gobierno Nacional. Pero hoy debido a la tardanza —en especial por la tardanza en las consultas previas con varias comunidades— la inversión podría superar los $60.000 millones.

Destacó Zuluaga que hasta el 2016 con la demanda que se tiene del servicio no habría problemas de suministro, pero desde diciembre de ese año, en adelante, comenzarían a surgir los temores de los riesgos de interrupción.

De allí, anotó, la necesidad de acelerar el proceso de la consulta previa que se adelanta con 10 de las 15 comunidades asentadas en la zona por donde pasará el tendido de las líneas de energía.

“Es necesario que el Ministerio del Interior defina esas certificaciones a los consejos comunitarios restantes para comenzar a concertar con ellos. Si tenemos todo listo, en un año quedaría lista la segunda línea, lo cual será un gran alivio para todos, pues el fantasma de los apagones y los demás riesgos quedarían superados”, precisó el Gerente de la Epsa.

Riesgos y riesgos

Debido a que Buenaventura solo tiene una línea de transmisión eléctrica, los atentados por parte de las Farc, la caída de voltaje y los problemas climático exponen al municipio a sufrir apagones y cortes de energía.

El último incidente fue en agosto pasado cuando, por un ataque dinamitero contra una torre de energía, el Puerto quedó tres días sin ese vital servicio.

Las pérdidas del comercio y las industrias pesqueras superaron los $2.500 millones, lo cual causó zozobra entre la población y desazón entre los comerciantes, muchos de los cuales debieron acudir a plantas a gasolina para operar sus negocios.

Alexánder Micolta, director de la Cámara de Comercio de Buenaventura, dijo en ese entonces que la situación fue muy delicada, dado que muchos productos básicos, en especial cárnicos y pescado, se perdieron debido al prolongado apagón.