Que no se haga ilusiones ninguna persona, la DEA no volverá al país, porque ese organismo utilizaba de manera política la lucha contra el narcotráfico, manifestó.
Al respecto, denunció que esa entidad en lugar de apoyar en la lucha contra el narcotráfico en Bolivia realizaba tareas de espionaje y de control político a las autoridades nacionales.
Además indicó que el Ejecutivo no permitirá certificaciones unilaterales en la lucha contra el narcotráfico, permeadas por intereses políticos.
Por el contrario, destacó la instalación permanente de la Oficina de Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito (UNOD), instancia multilateral capaz de evaluar a todos los países y sus esfuerzos en la lucha antidroga, según sus palabras.
El funcionario señaló que la cooperación será bienvenida siempre que no intente subordinar al país políticamente, o viole la soberanía y pretenda imponer condiciones en la política interna.
Llorenti aseguró que Bolivia cumple a cabalidad sus compromisos y reclama el concurso de la comunidad internacional para trabajar en forma conjunta en el marco de la responsabilidad compartida frente a este flagelo.
Asimismo, subrayó que su nación recibirá “agradecida la cooperación de distintos lugares del mundo, pero con el interés supremo de la humanidad de luchar contra el narcotráfico”.
Tomado de Cubadebate