En estado crítico se encuentra su hijo de cuatro años de edad, Edwin Eduardo Bohorquez, quien recibió un disparo en la columna vertebral a la altura de la región cervical y que está siendo asistido por organismos médicos.
Los hechos ocurrieron cuando el líder comunal se desplazaba en una motocicleta por la población, luego de las crecientes amenazas contra su vida que, según organismos defensores de derechos humanos fueron denunciadas oportunamente a las autoridades.
Al ser blanco de varios actos de intimidación, había acudido al Ministerio del Interior y de Justicia, con el fin de hacerse a mecanismos de protección y de seguridad que, según la Asociación, nunca recibió.
Los grupos de víctimas exigieron al Gobierno un mayor compromiso para garantizar la vida de sus líderes y permitirles el libre y normal desarrollo de sus actividades a favor de la defensa de los derechos de desplazados y familias victimizadas por acción de la violencia socio política que mantiene enfrentados al Estado y las organizaciones delincuenciales.