Las organizaciones étnicoterritoriales y las jurisdicciones eclesiásticas que integramos la Coordinación Regional del Pacífico colombiano, saludamos con entusiasmo y esperanza a la marcha convocada para el día de hoy por la Diócesis de Tumaco.
El Pacífico Sur históricamente ha vivido y sufrido la marginación, discriminación y empobrecimiento sistematizado, en abierto contraste con la riqueza cultural y territorial de sus pueblos negros e indígenas. Esta realidad de contrastes e injusticias contra sus gentes, ha sido agravada por la presencia y control que han ejercido los actores armados en contra de la vida, los territorios y la integridad de la población civil.
En estos momentos de llamados a la paz y reconciliación nacional, instamos al Estado colombiano a responder por su obligación constitucional de garantizar, asegurar y proteger los derechos individuales y colectivos de toda la sociedad colombiana y de manera especial, a los pueblos del Pacífico, quienes han sufrido con mayor rigor las violencias y la ausencia de inversión social, económica y cultural que predomina en el país.
Un abrazo solidario a todo el pueblo Tumaqueño, a la Diócesis de Tumaco, a las organizaciones étnicas y sociales quienes el día de hoy salen a las calles a denunciar los diversos atropellos y violaciones de los Derechos de las comunidades y a manifestar sus exigencias a la institucionalidad pública local, regional y nacional.
Esta marcha representa vientos de esperanza y de dignidad de los pueblos del Pacífico Sur que acompañados de la iglesia y otros sectores solidarios, abren caminos de unidad y un futuro justo y fraterno para sus comunidades y sus territorios.